martes, 10 de julio de 2012

Vacaciones a Londres!

Londres es una ciudad curiosa. O eso nos han contado, porque no la conocemos. Forma parte de un eje de turístico/cultural europeo que, junto con París y Roma, da a Europa enorme repercusión turística.

Lo curioso es que nunca nos había llamado la atención. París la hemos pateado varias veces, y Roma también. Pero, Londres... no le veíamos el interes.

La casualidad ha querido que mirando donde ir de vacaciones, hemos encontrado que Iberia, en código compartido con Vueling,  nos hacía un vuelo directo a Londres tirado de precio... vamos, más barato ir a Londres en avión que ir a Pamplona en autobús. Así que había que aprovechar.

Claro, que en Londres no es fácil encontrar un alojamiento céntrico a un precio asequible (la verdad, tampoco en Roma), en un momento dado parecía que habíamos conseguido cuadrar el círculo:

Un hotel, cerca de Old Street (que no es que sea el 'meollo' pero no está lejos), por menos de 60€ por noche la habitación doble. De una cadena que, sin ser muy famosa en estos lares, ya había tenido oportunidad de probar. Y no tenía mala pinta, la verdad. Incluso en booking lo ponían razonablemente bien. 

Pero empezamos con el jueguecito de los 'poyaques'. "Po' ya que estamos, mira, aquí hay otro de la misma cadena que está al lado del Tower Bridge, y solo son 20 € más"


Así que, decidido. Ya tenemos hotel. Vamos a la web, y hacemos la reserva. Sacamos la visa, pasa a la pasarela de pagos del banco, nos manda la clave al móvil, recibimos un SMS de confirmación del pago... y la web del hotel da un error. No tenemos reserva. Pero... si se ha cobrado. Pues no, no hay reserva. A ver si doy a este botón... otro SMS... se ha cobrado OTRA VEZ! Y de nuevo el mismo error en la web. O sea, que hemos pagado dos veces... y no tenemos reserva!

Intento llamar al hotel, pero me sale una grabación corporativa de la cadena. Busco el chat de atención al cliente... pero a esas horas está apagado. Llamo a los hoteles españoles de la cadena... y sólo pueden darme un correo de contacto. Así que mando correos quejándome a todas las direcciones que encuentro.

Al día siguiente, de visita a mi banco. Les cuento la historia, y me confirman que ese dinero en la visa no está cobrado, sino solamente retenido. Que mientras el comercio no 'cruce' (entiendo que es algo parecido a mandar confirmación), no se cobra realmente, y que si no lo ha hecho en 10 días, se desbloquea. Así que toca esperar.

Mientras tanto, al día siguiente, me llaman de la cadena. Empezando con mal pie, porque han confundido mi nombre con mi dirección. Pero bueno. Me ofrecen ayuda para completar la reserva. Le explico que hay dos pagos hecho, y que necesito cierta garantía de que no va a volver a pasar. Me dice que ha sido culpa del banco, y me procesa la reserva de nuevo. Pero... ¡que cosas! El precio que me da es 30€ más caro que lo que había cogido yo. 

- Oiga, pero esto no es lo que reservé anoche.
- No, claro, ha pasado un día, se han reservado habitaciones, las ofertas se van acabando...
- Pero, oiga, mire, todo eso no es problema mío, yo hice una reserva anoche, el precio no era ese, y al fin y al cabo han sido ustedes los que tenían problemas con el banco, yo hice todo lo que pedían en la web.
- Pero a nosotros no nos ha llegado por el error que hubo, y ahora mismo la oferta que hay es esa.
- Y qué culpa tengo yo del error!
- Señor, si a nosotros no nos ha llegado la reserva no podemos hacer otra cosa.
- Pues yo, en estas condiciones, que no son las que eran cuando la contraté, necesito pensármelo primero. 
- Señor, cuanto más tarde en hacer la reserva más va a subir el precio.
- Anoche su oferta era la mejor, pero quién me dice que, habiendo aumentado el precio, no encontraré algo mejor?
- Señor, la promoción ahora mismo es la que le estoy contando, y usted debería aceptarla, porque no va a encontrar nada parecido.
- Muy bien, correré el riego.

Pero, claro, uno llega a casa, y ve que, el tío podía ser un arrogante desgraciado, pero al menos tenía motivos para ser arrogante: era cierto que no había nada de ese precio en una zona tan céntrica. Así que a la noche, y creyéndome que era problema de mi banco, intenté hacer la reserva con otra tarjeta de otro banco. 


El resultado: la culpa no era del banco. Otra vez el mismo problema. Me planté con tres pagos de dos precios diferentes hechos (o al menos con los fondos bloqueados). Un total de 650 €!! Que se dice pronto!!

Así que hasta ahí. Confiando en mi banco que me garantiza que ese dinero se va a desbloquear en breve, y como el de la segunda tarjeta me dice que ni siquiera le consta ese pago, confío en que mi dinero se desbloqueará y les mando allá donde se merecen. Y me voy a hacer una reserva a otro hotel. Más céntrico, un poco más caro, pero con desayuno e Internet wifi incluidos. Pues mira, lo uno por lo otro. Y, sobre todo, la seguridad de que esta otra cadena tiene hoteles en el Gran Bilbao, así que nos plantamos físicamente en uno, y nos hacen la reserva en un ti-ta. Cero problemas!

Eso sí, entre el 'poyaque', el retraso por el día de más, el desayuno y todo eso... al final nos hemos gastado 100€ más de lo que queríamos. Pero, por otro lado... qué bien se queda uno cuando se permite el lujo de no pasar por el aro de un arrogante!

Así que, hoy, que los desbloqueos han emepzado a hacerse, me permito, por fin, contar todo esto con cierta tranquilidad. Y ya contaré qué tal ha ido la cosa en el Ibis Styles Southwark Rose!!

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2 comentarios:

Ester dijo...

Arrogantes “haylos” en todos los sitios, pero como dices, no consentírselo es un placer y siempre he oído que los problemas que se solucionan con dinero no son problemas, así que a disfrutar del viaje y buenas compras. Saltos y brincos Ester

Niretzat - Para mi dijo...

Bueno, es solo una primera toma de contacto con Londres, así que la idea no es hacer compras, sino empaparse del ambiente. De todas formas... gracias!